al borde del ocaso
tu brillo escurridizo
susurra con el viento
abrís las mil puertas,
las ventanas de Moebius,
abrís tu boca que todo lo esculpe,
tus piernas
es el sol que se abre
y restaura tus gritos sombríos
en un silencio diáfano
justo ahí donde muere la noche,
en esa curva donde los finales
hacen el amor con los principios
ahí donde el ruido diminuto
evidencia la vida,
y donde, también, algo tiene que morir
y muere.
10 comentarios:
WOW excelente.. que lindo tus versos.. me los quedos.
Saludos fraternos con cariño.
Un abrazo
Besos
los ocasos tienen ese misterio, que tanto se parecen a nosotros.
Un beso
Gracias Adolfo por ese entusiasmo que me alegra.
un beso!
los ocasos...
son tan hermosos!
Gracias por pasar, Edu.
Un beso!
Leo cosas que me alegran el corazón,!!!Gracias.
La vida es circular... elíptica en alginos casos.
Cambiante y no cambiante =)
Ay, Hydro, qué lindo eso que decís!
Gracias!
un beso!
eika, aquí sigo envuelta en las paradojas.
gracias por acompañarme.
un beso!
atardeceres...amaneceres...
tránsitos y paisajes de las duraciones.
excelente imagen la que me ha reflejado en el tejido neuronal.
besos volados Paula.
Juanra,
besos que vuelen también a tu horizonte!
Publicar un comentario