(foto del salar de Uyuni, Bolivia)
Un trazo filoso bosqueja
el contorno de este día:
es blanco,
sólo permanece fuera de nosotros
nos acurrucamos en él
como si fuéramos capullos,
frutas amontonadas en las manos
o piedras acantiladas
pero somos migajas de cielo,
latidos frágiles
y astillas de tiempo
somos tierra que vuela
y tierra que se ablanda,
voces que callan afónicas
y ojos que se abren como por primera vez
el día es blanco,
sólo permanece dentro de nosotros.