lunes, 17 de septiembre de 2007

Sordina

la mancha o la sombra
de lo que allí estuvo /
el punto final colocado al principio
es la inminencia de la paradoja

entonces / no grito / mascullo afonías
acallo la inercia /
invito al ingenio
a redirigir el rumbo
que invente las voces /
que enlace lo fútil

por ejemplo:
los cables de la lámpara
electrificando el horizonte

o por ejemplo:
los restos de agua
en un hoyo sin preguntas ni respuestas

otro:
una botella oblicua
equilibrada en un punto diminuto de su existencia

y ahora por fin
los puntos suspensivos...
(el intervalo)
lo que disimulo o no digo
evidencia de que algo ya sucedió
mi tendencia de línea
que se pierde en la curvatura de la tierra.

6 comentarios:

Unknown dijo...

Y el signo de pregunta, presente a cada instante invitando a la incertidumbre, desalentando a las certezas.
El de admiración, ausente que parecía con aviso, viene de la mano del lector, que lo mira colocarse al final del elogio merecido!
Muy buen poema Paula!
Ricardo

Anónimo dijo...

Creo que tu arte cumple una compleja función, que se manifiesta en lo mas simple, conectarse con otras almas.
Adelante Paula.

paula varela dijo...

ricardo... gracias por agregar puntuación a esta gramática del silencio.

mi abrazo.

paula varela dijo...

chiqui:
tus palabras son aliento / tibieza / sonrisas

gracias!

cipriano dijo...

y otro: que la nada no se lleve la promesa de otro milagro

me gusta tu poesía

paula varela dijo...

brindo por que la nada no se lleve esa promesa...

un placer su visita, Cipriano.

(besos)