jueves, 23 de diciembre de 2010

Todo lo demás

eso no tiene
ninguna importancia:
que seas un sobreviviente del abismo
donde descansan los lobos
o simplemente que renazcas otra vez
en lo que algunos llaman
tu única vida

no
eso es rutina
eso es como respirar

pero lo demás, sí:
que te rías un poco
de tanto absurdo
o que estallen tus lágrimas
que pegues la cara
a tus rodillas
y llores
como sólo pueden llorar
las ramas de un sauce

o dejarte derramar por las mareas
aunque sea jueves
o estés solo
o simplemente
no haya pasado nada
de lo que hubieras esperado

por eso digo, todo lo demás, sí:
dos o tres encuentros
que te devuelvan la sensibilidad
o te hagan blando como el mar
de las siete de la tarde
dos o tres coincidencias
que te hagan caer
que hagan que todo
caiga a tu alrededor
con el rugido
de un verdadero triunfo
uno que por fin
te sirva para algo
por ejemplo
para entender que estás vivo.

sábado, 11 de diciembre de 2010

Verde y rojo

ya sé que le faltaba sal
pero creo que nunca me salió tan rica
la tarta de espinacas

¿viste el color?
verde y rojo: mi calma y mi euforia
y mi amor en los dedos
(debe haber sido eso)
mi amor en los dedos

porque todo lo demás es inevitable ¿sabés?
el calor del horno
los aromas
comprobar sin asombro
que nuestros discursos pueden ser falibles

o degustar el sabor
cuando la tarta está lista
mientras observamos que nuestros cuerpos
se desvanecen
mostrando su preciosa debilidad

después tragar cada bocado
como si devoráramos el ahora
esa falta de razones
las tantas imperfecciones que somos
o el descubrimiento de que no todo está inventado
detrás de mi cuello

y tu amor en los labios claro
(debe haber sido eso)
tu amor en los labios

y ahora que simplemente
recuerdo la tarta de espinacas
aparece esta lluvia que viene con ese olor urgente
con ese murmullo casi inaudible ¿lo escuchás?
susurra algo así como un te creo
o tal vez lo que dice es un te quiero.